Entrevista a Pablo Marín, Arquitecto Técnico e Ingeniero de Edificación, en Heraldo de Aragón (19/11/2015).
De Zaragoza a Canadá. ¿No se podría haber marchado usted más lejos?
Me surgió la oportunidad de ir allí, vi que era el momento para obtener mejores metas en la vida y para potenciar el dominio del inglés. Muchas veces debemos salir de nuestra zona de confort para evolucionar Y Canadá es un buen país para echar raíces.
¿Por qué se fijó en este país y no otro?
Los canadienses son buenos profesionales. Es un país serio, con muchos recursos y seguro. Está preparado para la emigración.
Y está tan a gusto es esa nación que creo que está a la espera de la residencia permanente.
Sí, aposté por canadá desde el principio y sigo con esta idea.
¿No estará como el doctor en Alaska rodeado de alces y con gente peculiar?
(Risas) Donde yo vivo está a dos horas de la capital de British Columbia. Es el típico pueblo canadiense. Tiene temperaturas muy extremas, con inviernos de hasta menos 40 y 45 grados.
¡Y aquí nos quejamos del cierzo!
No tenemos vientos. La sensación térmica, si te abrigas, se lleva bastante bien.
¿Cómo pasa usted a trabajar en la construcción de una central de biomasa que lleva a cabo Iberdrola en Canadá?
Desde siempre me han interesado las energías renovables. Me surgió la oportunidad. La verdad es que tenía muchos conocimientos en el área, me seleccionaron y aquí estoy trabajando muy contento y muy bien. Tenemos que desarrollarnos profesionalemente y las metas las pone cada uno.
Su trabajo de «quality control manager», ¿en qué consiste?
Básicamente en interpretar y analizar la documentación textual y gráfica del proyecto. Llevo a cabo inspecciones, pruebas y mediciones para asegurar el cumplimiento de los estándares proyectados.
¿En España interesan las energías renovables?
Aquí lo que se utiliza como materia prima son residuos de madera. Nos ayudaría mucho a reducir el impacto de los incendios en España en zonas como en Cataluña o el norte.
Pero, ¿las energías limpias tienen futuro en nuestro país?
Eso depende de la apuesta de cada país. Canadá ha apostado firmemente por las energías renovables, cree en ello y la prueba es que estamos con dos proyectos de biomasa en esta provincia y espero que en muchas más.
Un buen ejemplo a seguir.
Es una energía verde lo que potenciamos en Canadá y creo que va a tener muy buenos resultados.
Una energía verde por la que España debería apostar más, ¿no cree?
En mi opinión, si. Aquí aprovechan los recursos naturales de todos los bosques. Tienen millones de hectáreas de bosques. Y también una política muy bien organizada desde el principio. Por ejemplo, de cada árbol que talan plantan dos. Es una política integrada en el sistema, junto con la abundancia de recursos verdes que tiene el país. Todo eso ayuda a la política energética verde.
¿Y cómo ve usted España desde fuera?
Veo un país muy inestable. Tiene que terminar de focalizar sus objetivos para la próxima década. Es un país con mucho potencial.
¿Piensa volver algún día?
Si. Estoy feliz y agradecido por las oportunidades que me está brindando Canadá. Pero siempre pienso en una posible vuelta a casa, cerca de mi familia y amigos. No es fácil ser emigrante. Pero esta es la aventura de mi vida. Estoy descubriendo mundos nuevos, paisajes maravillosos y gente extraordinaria. Pero es verdad que añoro a mi gente.
María Usán
